Juan Canals Carreras. L´Hospitalet de Llobregat 1964.

 

 

 

 

 

 

 

 

Modos de ser.

 

Creo que existe una tradición en mi país o comunidad con respecto al collage, en broma, se dice del catalán, que es esa persona que si se encuentra un botón en la calle, con el hace un abrigo para aprovecharlo, no creo que sea verdad. pero si es verdad, que hasta hace poco, este botón seria recogido, y guardado por si algún día hiciera falta. No hay que olvidar que la generación de mis abuelos, también la de mis padres, les toco vivir o una guerra y o la posguerra, en algunos casos, ambas cosas, la mayoría de las personas sufrieron en este país  graves restricciones, y el ingenio y la capacidad ahorrativa, eran producto de una cultura, que  era el resultado de unas  circunstancias. 

La modernidad anula de la memoria muchas imágenes que estaban presentes en la cotidianidad, quien con una cierta edad no ha visto algún día, papel de diario colgado en algún lavabo, en vez del típico papel higiénico.  que labrador, no aprovechaba los cordones de cualquier paquete recibido para atar las verduras de su huerto, las sabanas rotas, para reconvertirlas en trapos No hace muchos años, las bolsas de plástico, un lujo para aquel entonces eran guardadas, para ser reaprovechadas, y de esta forma un montón de cosas volvían a ser útiles. En broma digo que en cualquier excursión, si alguien se quiere llevar algo de comida, el papel de diario, es el que mejor conserva, mas si el diario es de derechas, ya que estos acostumbran a ser por naturaleza conservadores. si al anochecer el frío hace acto de presencia ese diario que conservamos nos ira muy bien para encender con mas agilidad un buen fuego que nos abrigara del frío.

 

Creo que en el contexto rural sobretodo, la falta por aquel entonces de recursos, hacían valorar, todo lo que siendo necesario a la vez, era difícil de obtener.

Hay un valor en las cosas, un valor por su dificultad de encontrarlas, un valor por la época en la que pertenecen, un valor por su plasticidad, por su forma, hay un valor también por el alma que algunos objetos encierran.

Los objetos que han vivido circunstancias particulares, parecen estar cargados de una energía especial.

Collage

En mi caso, creo que el collage, surge como algo natural, y circunstancial, El primer collage que me viene a la memoria, es el resultado de trocear para reutilizar, una pintura que realice y expuse en el Museo de Marburg.

Me explico..

Siendo alumno de la Facultad, quede seleccionado, para una exposición de arquitectura y pintura, organizado por los estudiantes de historia del arte de Marburg.

De acuerdo al espacio que teníamos asignado, debíamos realizar a modo de estandarte una pintura por artista, cuyas medidas, si la memoria no me falla, eran de 3 metros de altura por 1 de ancho. 

Una vez acabada LA MUESTRA, las telas fueron desenteladas del bastidor para poder transportarlas, dentro de nuestras condiciones económicas a Barcelona.

Evidentemente esas telas un poco delgadas,y sin ser preparadas adecuadamente, no eran un soporte perfecto para una pintura extendida de mil formas diferentes.

En mi caso como prácticamente en el de casi todos, la tela , para su perfecta conservación debería volver a ser entelada a un bastidor y guardada correctamente, ante lo que suponía todo esto. Opte por trocear la tela y a modo de relicario fui introduciéndola, pegándola, en diversidad de obras que iba realizando. Tela que utilizaba como soporte o también como parte activa en la obra. creo que este es el primer collage, que realice de forma natural.. 

( Podria quizas adjuntar el valor de relicarium a este primer proceder en el Collage, es decir recortar en pedazos el resultado de un trabajo, que ha significado la escenificacion en mi caso de un exito logrado, es decir el logro de exponer por primera vez en Alemania, y en un Museo, añadiendo el recuerdo de una experiencia muy satisfactoria por el trato recibido desde la Organizacion y por el recuerdo de la convivencia con los compañeros y organizadores.  Fueron quince dias, creó).

Posteriormente. otra de las formas que adquirió realidad el collage en mi obra fue desde un concepto de territorialidad.

Esta nueva forma de trabajar el collage, vino por el cambio de taller, me traslade a un nuevo taller presidido por una mesa de unos tres metros cuadrados, cualquier trabajo en aquel entonces desarrollado en formato pequeño, colocado encima de dicha superficie pedía a gritos crecer, y en cierta forma y en ese espacio , muchas de mis obras que trabajaba por sesiones, es decir sin el concepto de empezar y acabar, fueron creciendo en formato o bien por anexión o por superposición.

Escultura povera.

Algunos collages escultóricos que realice eran simplemente construcciones que bajo una forma neofigurativa, permitían mostrar algunos elementos que posiblemente estando ya fuera de circulación poseía una historia, una vivencia, una circunstancia. ( tenia la implonta del tiempo inscrito en la superficie ).

El Tiempo y el Collage.

El tiempo, fue otra circunstancia circunscrita en mi obra. Esta observación viene dada por un artesano orfebre, de  Gracia entusiasta de mi obra.

La verdad, es que nunca había realizado antes esta reflexión, es cierto, que en el trascurso de mis sesiones en el taller, laburando, trabajando, voy por el camino, desechando obras, dejando otras inconclusas, y que en cierta forma, estas obras, quizás desechos, pero resultados de momentos vividos, de momentos gastados, de momentos dedicados a la creación. Son obras, en el que algunas de sus partes vuelven a ser reintroducidas en alguna de esas obras que voy realizando en diversidad de sesiones. Es quizás la voluntad de reintroducir un desecho, un trozo, un pedazo, una extensión de ese momento, en el que creando, no se obtiene ningún resultado, desde un punto de vista de obra terminada, no obstante se quiere guardar la presencia de ese momento vivido.